Se cruza todo el pueblo y al final se coge el camino detrás de la iglesia
de Santiago. Precioso y largo tramo en el que veremos bastantes
miliarios. Las flechas nos llevarán hasta el embalse de Alcántara y la
N630 ya que es la única forma de cruzar los ríos Almonte y Tajo.
Llegamos al hostal Miraltajo y enfrente subimos la cuesta para retomar la
calzada. El camino no tiene pérdida y Cañaveral se divisa a lo lejos.
Cuando llegamos a un alto podemos seguir la calzada que baja y lleva
directamente a la entrada de la población o seguir las flechas hasta la
estación de tren y retroceder al pueblo.
Consejo: Observando el mapa os daréis cuenta que no hay muchos
sitios donde comer, o beber, por lo que se debe cargar suficiente agua
y comida.
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